lunes, 23 de mayo de 2016

Ruben Jaramillo, de influencia evangelica en el Mexico revolucionario y post revolucionarios


Hoy 23 de mayo de 1962, hace 54 años asesinan a Ruben Jaramillo.y a su familia




#Efeméride_INEHRM

23 de mayo de 1962

Asesinato en Xochicalco, Morelos, de Rubén Jaramillo 

Rubén Jaramillo nació en Real de Zacualpan, Sultepec, Estado de México, en 1900. Quedó huérfano a muy temprana edad y desde los 13 años vivió en Tlaquiltenango, Morelos. A los 14 años se incorporó al ejército zapatista donde obtuvo el grado de capitán. Después de la muerte de Zapata fue aprehendido y salió de Morelos.Al triunfar la rebelión de Agua Prieta, Jaramillo regresó a esa entidad y se involucró en la organización y la lucha por la reforma agraria del pueblo de Tlaquiltenango. En 1921 organizó el Comité Provisional Agrario de ese pueblo y en 1926 la Sociedad de Crédito Agrícola. En el gobierno del presidente Lázaro Cárdenas, Jaramillo le propuso la creación de un ingenio en Jojutla para que los campesinos volvieran a sembrar caña y dejaran la producción de arroz. Cárdenas le hizo caso y se construyó el ingenio de Zacatepec, que inició su operación en 1938. Jaramillo fue el presidente de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios, Obreros y Empleados de ese ingenio.El 9 de abril de 1942, encabezó la huelga de ese ingenio que buscaba mejores condiciones laborales para los trabajadores. Fue reprimida por el ejército y sus dirigentes despedidos y perseguidos. Ante ello, Jaramillo decidió que no había condiciones para la lucha pacífica y, junto con otros excombatientes zapatistas, empuñó las armas con el Plan de Cerro Prieto. El 24 de marzo de 1943 tomó por sorpresa Tlaquiltenango y se refugió en la sierra poblana. Al año siguiente, el expresidente Cárdenas intercedió por él y fue amnistiado por el presidente Manuel Ávila Camacho.En 1945 creó el Partido Agrario-Obrero Morelense, que fue precursor de la lucha feminista y lo postuló como candidato opositor a la gubernatura de Morelos en 1946. Su campaña logró movilizar a grandes contingentes campesinos, pero el triunfo fue para el candidato oficial Ernesto Escobar. Nuevamente los seguidores de Jaramillo fueron perseguidos y apresados. Jaramillo volvió a la clandestinidad. En 1948 apoyó la huelga del ingenio de Zacatepec por aumento salarial y contra la corrupción.Fue amnistiado nuevamente y regresó a la lucha política. Se alió al general Miguel Henríquez Guzmán en su campaña electoral por la presidencia de la República en 1952 y él compitió otra vez por la gubernatura de Morelos. El triunfo en ambos casos fue para los candidatos del PRI y henriquistas y jaramillistas fueron perseguidos. Rubén Jaramillo se levantó otra vez en armas y tomó Ticumán el 7 de marzo de 1954 y anduvo en la sierra hasta 1958 cuando se reunió con Adolfo López Mateos y regresó a la lucha pacífica. Apoyó a grupos campesinos en Morelos y la lucha ferrocarrilera y magisterial en 1958-59. El 23 de mayo de 1962, Rubén Jaramillo, su esposa y sus tres hijos, fueron secuestrados por militares vestidos de civil y asesinados cerca de Xochicalco.
Rubén Jaramillo. Ca. 1960. Imagen tomada del Archivo Gráfico de El Nacional, Fondo Personales, sobre, 1466. INEHRM.
Es conveniente revisar lo que el investigador Jean Pierre Bastian escribe en su obra "La Historia del Protestantismo en México Artículos de Jean Pierre Bastian: Introducción al Protestantismo y Sociedad en México"


5. LA SOCIAL-DEMOCRACIA MEXICANA Y EL PROTESTANTISMO

Estas tensiones entre el campo religioso y el campo político van a superarse con la elección del presidente Ávila Camacho. Afirmando "soy creyente", éste va a poner fin a las relaciones tensas entre Iglesia y Estado. Representando los intereses de la clase media y de la gran burguesía beneficiaria de la Revolución, él proclama, en junio de 1940: "un pueblo no es una mezcla heterogénea de clases, cada una luchando para sus intereses; es una gran unidad histórica enraizada en el pasado y luchando juntos pare un futuro común"." Las iglesias evangélicas, cuya fracción dominante abogaba exactamente por esto, van a entrar con entusiasmo renovado en el proyecto político reformista de los gobiernos revolucionarios de los años 40 en adelante. El Congreso Evangelista Nacional, reunido en Puebla en 1939, ya plantea la necesidad de la alianza de las iglesias y del gobierno en el mejoramiento económico y espiritual de los grupos laborales, rechazando el comunismo con su guerra de clase. Estos planteamientos no hacen sino reflejar la situación de clase de los sectores protestantes, pues, como lo nota el sociólogo norteamericano Merle Davis en su estudio de las iglesias evangélicas de México en 1940, "el estado económico y social de los evangélicos, en comparación
con el resto de la comunidad, es sumamente brillante y hace entrever la posibilidad de un grupo evangélico fuerte y vigoroso para el futuro"."170
Con el desarrollo de los grupos pentecostales," que surge precisamente como reflejo (y protesta) contra el desarrollo económico capitalista dependiente que hace migrar a millones de campesinos a los suburbios de las metrópolis, los evangélicos van a aumentar considerablemente a partir de 1950. Sin embargo, este protestantismo totalmente refuncionalizado y subordinado al proyecto político y
económico, tendrá menos oportunidad profética sobre los problemas provocados por el desarrollo mexicano. Más aún, va a ser instrumentalizado para la nueva lucha ideológica provocada por el desarrollo de la guerra fría entre el bloque soviético y el bloque capitalista. El Estado mexicano ya no encuentra su enemigo en la Iglesia católica sino en el comunismo y en los movimientos radicales que en el país pretenden orientar las luchas sociales hacia una radicalización de la revolución
democrático-burguesa. Esta línea va a endurecerse con la toma del poder por Fidel Castro en Cuba. Durante este período el protestantismo mexicano va a ser poderosamente "trabajado" para que produzca un discurso condenador del socialismo. Aun cuando de sus filas surjan elementos con espíritu de lucha y de compromiso hacia los desposeídos, el protestantismo dominante sirve de instrumento del gobierno para comparar a los más radicales. Así, en los años 1950 un líder evangélico morelense, Rubén Jaramillo, encabeza un movimiento agrarista que logra agrupar a miles de campesinos sin tierras.

2 comentarios:

  1. Nuestra juventud y las iglesias evangélicas deben conocer la obra de éste luchador social.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Asi es Rogelio, es importante divulgar estos sucesos y personajes

      Eliminar